domingo, 29 de noviembre de 2015

MI VOCACIÓN PRESIDENCIAL

Hola, soy Marco Antonio Malca Delgado, tengo 49 años de edad y soy de Lima, Perú.
¿Saben? Deseo ser Presidente de mi país, de mi amado Perú; y he estado reflexionando en todo lo que conlleva tener tan alto honor, responsabilidad y compromiso: Ser Presidente de un país es el cargo de servicio más importante a la que toda persona con principios, debida preparación profesional, honestidad, respeto, deseos de superación y amor a la comunidad debe aspirar para ver cada día más desarrollada y culta a su nación.
Deseo también expresarles que mi campaña política para este proceso ,se caracterizará por motivar a los ciudadanos de toda edad de mi patria a trabajar y estudiar para ser mejores personas, para lograr nuestras metas a través de nuestro esfuerzo y espíritu de lucha por cumplir nuestros objetivos.
No voy a ofrecer lotes de vivienda gratis, ni educación gratis, ni agua, luz y teléfono gratis, ¿Saben por que? ... por que debo lograr que mis compatriotas trabajen con dignidad, les enseñaré que todo cuesta en la vida, y se acostumbrarán a llevar a cabo sus proyectos de desarrollo en base a su esfuerzo y anhelos de trascender... ya no quiero que nos sigan haciendo daño tantos "Políticos" que ofrecen todo gratis, que regalan polos, comida y pan engañando a los más necesitados, a quienes por supuesto si ayudaremos en mi futuro gobierno, enseñándoles un oficio, brindándoles un plan de apoyo social hasta que puedan valerse por sí mismos y trabajar.  
Buscaré el mejor equipo de economistas y llevarán a cabo un proyecto nacional de desarrollo y explotación de nuestras riquezas, buscando finalmente una equitativa distribución de los sueldos y salarios, basado en las competencias y calificación de cada persona.
A través del ministerio de Educación promoveremos una gran cruzada nacional de la recuperación de la familia como célula básica de la sociedad, donde los padres asuman su rol de líderes de los mismos, y donde los hijos tendrán sus derechos, pero será su deber y obligación magnificar sus deberes.
Sé que lo que les estoy expresando no es fácil, quizás algunos me dirán loco o soñador por ser visionario de lo que necesita en realidad mi país, pero ya basta de tanta mediocridad, de tanta corrupción, de tanto chisme e ignorancia, nuestra patria merece desarrollarse, los Peruanos somos buenos, somos trabajadores, tenemos principios, llegó el momento de salir a las calles, de elevar nuestra voz, pero con energía y paz.
Tomaré como ejemplo lo mejor de nuestros antepasados, el ejemplo de trabajo de nuestros Incas, la valentía y cultura de Don Miguel Grau, el coraje y amor a la Patria de José Olaya, el inmenso Amor a Dios de Santa Rosa de Lima, la bondad de San Martín de Porres, la inteligencia y sabiduría de Jorge Basadre... es decir, para construir una nueva nación debemos cambiar nuestra actitud y buscar el firme propósito de cambio por el bien de nuestras familias y realización personal.
Las facultades de educación tendrán los mejores docentes y convenios internacionales de maestrías y doctorados, a fin de que los que estudian la carrera más importante de la humanidad sean lo suficientemente competentes para formar a los futuras generaciones exitosas, trabajadoras, honestas, éticas y responsables... nuestra patria necesita de un Presidente que haga todos los cambios mencionados líneas arriba, entre muchos que lograré en mi gobierno.
¿Saben amigos? Sé que algunos de Ustedes me dirán iluso, desubicado, tal vez loco, ya que no pertenezco a agrupación política alguna, pero tengan la seguridad, que al margen de mis deseos "Presidenciales"  es la firmeza de la vocación que siento en mi alma, cuerpo, mente y corazón de ver a mi patria desarrollada, a sus ciudadanos exitosos, educados, cultos, felices por sus logros y progreso... esa es la finalidad de estas líneas... busquemos un presidente con altos valores morales, elevación espiritual, competencias profesionales, liderazgo justo y asertivo, regulador equitativo de una nación que clama por seguridad, cultura, paz y progreso.
Deseo verlos felices... si algún día tengo alguna responsabilidad o cargo de servicio a nivel de gobierno, trabajaré en pro de mi patria, lo haré buscando que mis compatriotas crezcan en su autoestima y deseos de superación.
¡Viva por siempre mi querido Perú!
Dios los bendice siempre.

Marco Antonio Malca Delgado
Domingo, 29 de noviembre del 2015
13:17 pm
 

      

martes, 10 de noviembre de 2015

LA PARTIDA DE MANUEL

Kenji es un joven profesor de educación física, bonachón e identificado con su trabajo y familia.
Desde el mes de mayo su estado de ánimo cambio, ya que recibió la triste noticia que su querido padre padecía de cáncer, lamentable, dolorosa y mortal enfermedad que hasta nuestros días la ciencia lucha por vencer.
Desde entonces acompañó a su padre en todo momento, brindándole mucho amor, compañía y paz, en unión de su querida madre y familia.
Manuel, así se llamaba su querido padre, partió hace poco a la eternidad, ya culminaron sus sufrimientos, ya no estará presente físicamente ante su familia, pero siempre estará vivo en las mentes y corazones de sus amigos y familiares.
El sábado 24 de setiembre mientras jugaba fútbol, una llamada telefónica de su madre lo hizo recibir la triste noticia, y en solidaridad, sus compañeros de equipo lo abrazaron y oraron junto a el por el descanso eterno de su querido papá, debo resaltar la actitud generosa y fraterna de los maestros del equipo rival, quienes uno a uno se acercaron a expresar sus condolencias por lo acontecido.
Tuve la oportunidad de acompañar al profesor Kenji y su familia durante los funerales de su querido padre, el Señor Manuel, quién fue muy querido por su familia y amistades, y lo noté con claridad, por la cantidad de arreglos florales y personas que asistieron en estos sensibles momentos.
Dejó hermosos recuerdos a todos los que lo rodearon en vida, debo resaltar lo expresado por una señora quién era la hermana menor del occiso, y me dijo: " Nunca olvidaré lo bueno que fue mi hermano conmigo", "El me compraba mis regalos de navidad cuando fui niña"... sollozando, pero al mismo tiempo feliz de haber tenido un hermano tan bueno, tan sencillo, tan humano.
Una vez más tuve la oportunidad de compartir una serena oración y reflexión junto a la familia de Kenji, y compartir que en realidad somos "Seres espirituales con experiencia humana", es decir vivimos movidos no por lo material, sino por lo espiritual, que es lo que nos hace ser diferentes, por esa llama intensa llamada vida, la cual debemos cuidar, amar, desarrollar y trascender a través de nuestras buenas acciones y amor al prójimo.
¿Saben?, cada vez que voy a un funeral intento sacar de la tristeza a mis amigos y familiares... les digo: "Tranquilo(a)", "Ya cumplió su misión", "El / Ella quiere verte feliz", "Acuérdate de los momentos más felices que pasaron junto a tu familia y a ti"... y siento que cumplo en ese  momento con la misión que Dios me asignó como Educador: "Fomentar en todo momento una cultura de Paz y Amor, sobre todo en circunstancias difíciles".
¡Vamos Kenji! la vida sigue igual... tu padre nunca morirá... ahora te toca cumplir su ejemplo y enseñanza.
Los caminos de este mundo nos conducen hacia Dios...
Gracias Manuel por dejar a un buen hijo ... sé que ya llegaste a la inmortalidad.
Dios los bendiga siempre mis amigos.

Marco Antonio Malca Delgado
Domingo 08 de noviembre del 2015
12:59 pm.