Buenas tardes mis queridos amigos, me encuentro en éstos momentos leyendo una tarjeta con 10 hermosos consejos para ser más positivo, y el consejo número 8 dice lo siguiente:
"Se paciente contigo mismo y con los demás".
En realidad me autoanalizaba y observaba las actitudes de gran parte de la población y el valor de la "Paciencia" es en muchos ámbitos considerada como un "Antivalor".Por ejemplo cuando en el entorno familiar damos indicaciones a nuestros hijos u otros miembros de la familia y vemos que se demoran por que lo hacen a su "Ritmo", por lo general actuamos con molestia al ver que son lentos, demorones, "Tortugas" y los hacemos sentir mal y en muchos casos nos ponemos como ejemplo de eficacia y eficiencia al realizar alguna actividad en forma "Veloz" .
Ser paciente no significa ser lento, ser paciente significa ser observador, pensante, estratégico, saber esperar, y es necesario serlo en primer lugar con uno mismo.... es tan difícil.... pero debemos buscar lograr ser pacientes en un mundo tan acelerado, que vive tan rápido, que quiere todo ¡ya! ¡Ahora! ¡de una vez! sin muchas veces haber realizado una reflexión o investigación en base a lo que buscamos, anhelamos y tenemos como objetivo lograr.
Investigué en un conocido diccionario el cual expresa que la Paciencia es la gran actitud que lleva al ser humano a poder soportar contratiempos y dificultades para poder conseguir algún bien.......... muchas gracias querido diccionario, me hiciste sentir bien y que en realidad no estoy tan desviado de la ruta de mi misión de vida, y es que como Educador y ser humano debo ser paciente con mis semejantes ya que muchos también lo son conmigo, regreso a cuando fui niño y me imagino la gran paciencia que tuvieron mis padres para criarme o tal vez ver buenos resultados en mis estudios.
Paciencia es constancia..... es un valor que se opone a la violencia, al mal, a que sufran las personas..... recordando acá que me refiero al valor de la paciencia, y no al "Paciente de hospital", ya que es otra situación completamente diferente.
El gran filosofo Aristóteles alude esta virtud como equilibro entre emociones extremas y así conseguir sobreponernos a emociones fuertes generadas por desgracias o aflicciones que en nuestro transitar por el mundo tenemos.
Tenemos grandes recuerdos de maravillosos seres humanos que mostraron inmensa paciencia para conseguir sus logros o para comprender su misión o a su entorno social y cultural: Recordemos el libro de Job en la biblia y la gran paciencia de su protagonista, la gran paciencia de Jesús de Nazareth para comprender y enseñar a sus discípulos y seguidores, la paciencia y perseverancia de Albert Einstein para lograr sus avances científicos, la inmensa paciencia que tuvo el Gran Madiba Nelson Mandela al estar en prisión injustamente por 27 años de su vida y salir "Fortalecido" y con un corazón grande para perdonar, la paciencia de la Madre Teresa de Calcuta para atender y dar Amor a tanto enfermo y desvalido junto a sus buenas hermanas de la caridad, la paciencia de Cristóbal Colón para llegar junto a las carabelas al otro lado del planeta, la paciencia de un maestro para comprender, corregir y enseñar a sus alumnos, la paciencia de una madre gestante para llevar en su vientre por casi nueve meses al nuevo habitante del planeta y ser amado...... la paciencia de la naturaleza al soportar tanta contaminación ocasionada por sus propios hijos.....nosotros los seres más inteligentes sobre la tierra..... la paciencia como valor fundamental si en realidad anhelamos vivir en paz y en armonía.
Ser paciente amigos lectores es demostrar una gran personalidad y madurez, es una gran virtud y ayuda a las personas a tolerar contrariedades y adversidades con fortaleza y valentía.
Las personas que usan la paciencia como estrategia y estilo de vida, saben esperar con calma a que los acontecimientos sucedan, ya que están convencidos que para lograr algo fecundo y bien organizado se le debe otorgar el tiempo debido.
Finalmente y desde mi posición de Educador exhorto a mis dilectos colegas del mundo de la Educación y la Cultura a que sean portadores de amplia paciencia en sus actos y en sus clases, que enseñen a sus alumnos a que las cosas no se consiguen sin antes haberlas trabajado, procesado y llevadas a cabo, y para lograr tal cometido debemos tener impregnados en nuestras mentes y corazones el valor de la Paciencia como base angular para lograr nuestros objetivos y propósitos en la vida.
Dios los bendice siempre queridos amigos.
Sábado, 26 de abril del 2014
06:51 pm
