viernes, 25 de marzo de 2022

LAS CLASES "HÍBRIDAS"

Después de dos años de heterogéneas clases "a distancia", los estudiantes de educación inicial, primaria y secundaria del Perú volvieron a sus escuelas, sean públicas o privadas.

El sistema educativo del Perú está colapsado, con funcionarios incompetentes que politizan el mismo, docentes en alto porcentaje desactualizados y con bajo nivel cultural, ya que no eligieron la carrera magisterial por vocación: fue la última opción al no poder ingresar a otras facultades, duro pero cierto, salvo honrosas excepciones, la investigación llevada a cabo hace menos de 10 años especifica: "El 44% de docentes del sector público y el 35% del sector privado no lo son vocación"... ¿Qué hacer?

La pandemia continúa, es cierto que ha bajado la cifra de infectados, las autoridades del gobierno lanzan ideas populistas, no muestran las escuelas públicas, que dicho  sea de paso están inoperantes, ya que en dos años no las han reestructurado en lo absoluto.

Los colegios privados que han "sobrevivido" a esta época de enfermedad mundial, han sido los que mostraron cultura educativa y humanística, sincera preocupación y aprecio por las más queridos del hogar, estableciendo contacto con los padres de familia para saber como está la salud familiar, en que pueden ayudar, logrando un gran vínculo entre la escuela y el hogar.

Lo más retador en la actualidad es "nivelar" a los alumnos en sus aprendizajes, ya que en dos años se atrasaron en el avance de la malla curricular por diversas razones: no tenían laptops y tablets, habían problemas de conectividad, abandonaron los estudios, etc.

Si a esta situación agregamos que literalmente pasaron al siguiente año sin mayor esfuerzo, ya que las autoridades del Ministerio de Educación facilitaron la cultura de la dejadez y la sobreprotección, el tiempo para lograr nivelar a nuestros educandos demorará varios años: ¿Dos? ¿Tres? ¿Cuatro?... difícil de precisar, lo cierto es que las familias que accedieron a una educación privada de calidad lograrán esta meta en plazos menores.

En el centro de toda esta barbarie social, política y cultural, están los profesionales de la educación, que han redoblado esfuerzos por dar mejores clases a sus pupilos, quedando demostrado que por el momento la tecnología no puede reemplazar al ser humano, y que en estos días de retorno a la escuela tienen que afrontar el "cargamontón" que vienen recibiendo de los padres de familia, en especial las escuelas que han optado inicialmente por brindar clases semipresenciales o híbridas para salvaguardar la integridad de los estudiantes y en lo posible evitar que se contagien del COVID - 19.

Soy participe activo del gran esfuerzo de docentes de mi centro de labores, y testigo del gran compromiso de la escuela donde laboro, pero aún así es inevitable que por momentos tengan problemas de conectividad, interferencia, problemas de la red, etc. siendo desde mi punto de vista el aspecto más retador, el dar clases a alumnos frente a ellos y al otro grupo desde sus hogares, ocasionando alto estrés en los maestros, de quienes doy fe de su gran compromiso profesional y ético, con el único objetivo de ofrecer seres humanos extraordinarios en las nuevas generaciones de Peruanos.  

Anhelo que pronto retornen todos a la presencialidad, las clases híbridas en la educación básica regular es un gran reto de desarrollo, teniendo en consideración que los niños y jóvenes requieren una asistencia constante, y que no hay como las clases en el colegio, pero también es latente que esta modalidad llegó para quedarse por siempre, y visualizo que en un futuro no muy lejano, las familias optarán por clases presenciales o remotas, que inclusive podrán elegir las escuelas de sus hijos, sean locales o de provincias, y que las escuelas del Perú y del mundo estarán conectadas en red pudiendo organizar encuentros virtuales en tiempo real como foros educativos, círculos de calidad estudiantil y otros.

Entramos en una nueva revolución de la educación, aceptémosla con tranquilidad y aplomo, con sabiduría y paso sereno, los maestros del mundo hoy más que nunca debemos demostrar que ninguna máquina reemplaza los sentimientos, liderazgo y calidad humana de personas que día a día se preocupan por asegurar nuevos seres humanos, con buenos sentimientos, conocimientos y valores para lograr un mundo más unido, más fraterno, más humano.

Lo esencial es lo interior.

Marco Antonio Malca Delgao

Viernes 25 de marzo del 2022

04:54 am            

 


   

 

lunes, 14 de marzo de 2022

NACIDO EN 1939

Nació el 15 de marzo de 1939, el mismo año en que inició la segunda guerra mundial, pero tuvo suerte, ya que nació en el Perú, en un puerto norteño de ensueño, poemas de amor, ilusión de un mañana mejor y retos de desarrollo, que con esfuerzo y amor superó.

Roberto Zacarías, así se llama ese niño del ayer que camina con mirada serena, tranquilidad de los años, recuerdo de lo vivido y caminante en el presente, así cobra vigencia un ser humano categoría 83, con 30, 295 días respirando buenos aires, los mismos que lo llevaron a navegar por la hermosa travesía de su existencia, en las cuales sus remos fuertes y llenos de fe no permitieron que la balsa se hunda, y soportaron marea alta, vientos agresivos, temblores y terremotos; pero también cielos estrellados, aire fresco, buen café y la compañía feliz de una familia que supo forjar.

Hijo de Celia y Alberto, sus inolvidables padres, de los cuales solo guarda los mejores recuerdos, anécdotas y lecciones de amor, por los que solo siente gratitud y comprendió su existencia, aquella experiencia de padres que los llevaron a tener varios hijos: Teresita, Josefina, Benito, Wilson, Alfredo y Adolfo,  de los cuales tres ya partieron, y que los lleva por siempre en el corazón.

Cargador de latas de agua, ayudante de albañil y vendedor de loterías, estudiante ilusionado de uniforme de comando, caminante descalzo que supo dejar huellas en cada paso, se propuso dejar el puerto de Pacasmayo para lograr el desarrollo en la ciudad de los reyes, esa Lima de los sesentas con música romántica, deseos de superación, ilusiones y retos, esa ciudad que lo vio sonreír cuando cuando nació su primogénito Roberto, y abrazó con amor a Arturo el último de los herederos.

Muy querido por los "Muchachos" y las "Chicas" de su promoción del colegio nacional "José Andrés Razuri" de San Pedro de Lloc, de la cual guarda las mejores enseñanzas, las mismas que cobran actualidad al demostrar que la buena educación no tiene época ni edad.

El viaje de Roberto a través de su experiencia humana y espiritual, lo llevó a elegir a una buena compañera, su Miriam de toda la vida, la que lo supo comprender y valorar, la que no permitió que se cayera cuando el desánimo lo visitaba, la que trajo al médico una madrugada de invierno, al verlo enfermo, logrando que se levante, sane y siguiera con calma.

Padre bueno y exigente, enseñó a sus hijos a que primero es la patria, bailando con mamá un vals o una alegre marinera, así como recitando un poema de Vallejo o de Darío de los que sólo un hombre romántico sabe declamar.

¿Y los defectos de Roberto? ¿Acaso no los tiene?... ¡Pues claro que sí! y los reconoce, porque no es perfecto, y se disculpa... y guarda silencio, ese silencio bueno que lo hace pensar en el cambio que debe dar, para cometer menos errores, para no dañar a nadie, ese silencio que brinda capacidad de pedir perdón y de perdonar, ese corazón noble que logra un caminante de más de 30,000 días por la humanidad.

Roberto Zacarías Malca Cobián, es el nombre completo de un ser humano nacido el año 1939 del pasado siglo XX, esposo de Miriam, padre de Roberto, Eduardo, Marco, Jorge, Cecilia, Javier y Arturo; abuelo de buenos nietos, buen hijo y noble hermano, querido compañero de promoción, vendedor de artículos de limpieza, empresario junto a Dunker y Gabriel, recitador de poemas de amor, capitán del barco de su existencia, que supo enfrentar los fuertes vientos que lo llevaron a enderezar el camino, y que no se hundiera en altamar.

En estás líneas breves escritas de corazón, doy gracias al Divino por darme la dicha de contar con un buen padre, que a lo largo de mi vida acompañó bajo toda circunstancia, que a pesar de los momentos sentidos no dejó de estar presente, y que consiguió todo en la vida con esfuerzo: "Con hacha y lampa", como bien sabe expresar. 

¡Feliz cumpleaños 83 querido papá! ¡Gracias por ser bueno, gracias por existir!

Tu hijo Marco Antonio.

Marco Antonio Malca Delgado

Martes 15 de marzo del 2022.

01:26 am