Miércoles 08 de noviembre del año 2023, fecha especial para millones de peruanos que gozan de su deporte favorito y la pasión que sienten por los clubes más populares del fútbol nacional: Alianza Lima y Universitario de Deportes, ambos con la hinchadas más numerosas de tan querido país.
Esa noche tocaba jugar la segunda final en el estadio de Alianza, en el populoso y alegre barrio de Matute, en el tradicional distrito de La Victoria, pero sólo con simpatizantes e hinchas de los blanquiazules, ya que ahora hemos retrocedido socialmente, y ambas hinchadas no pueden estar en los partidos del equipo de sus amores, por los brotes de violencia extrema de seudo barristas que deslucen un encuentro deportivo que debería servir para unir a un pueblo, país y comunidad.
Culmina el partido con triunfo de Universitario 2 goles a 0, coronándose campeón del torneo del fútbol peruano, ante más de 30,000 hinchas de Alianza Lima, y de pronto: ¡ Apagón Total en el estadio ! ¡ Se fue la luz ! ¿ Qué pasó ? ¿ Hubo apagón en la zona donde está el estadio ? ¿ En el distrito ? ¿ En Lima Metropolitana ? ¿ En el Perú ? ¿ Que sucedió ?
Pues sucedió algo que viene aconteciendo en el Perú a través de su historia: " Se apagaron las luces entre peruanos".
¿Y qué significa ese "apagón histórico"? Reflexionemos...
Divisionismo entre compatriotas por diferencias sociales, raciales, económicas y culturales, gobiernos que se dedicaron a desfalcar y robar descaradamente, terrorismo y crímenes entre compatriotas, coimas y estafas por doquier, ministerios plagados de ociosos y personas incompetentes, hospitales colapsados, escuelas en estado deplorable, sicariato y extorsionadores, delincuentes capturados y que salen libres al día siguiente, mercado laboral con sueldos irrisorios, guerras perdidas, federaciones deportivas con dirigentes corruptos... y un largo etcétera.
Lo sucedido el 08 de noviembre no nos debe extrañar, lo debemos aceptar como algo "natural", ya que eso hacemos todos los días en el Perú, a pesar que no puedo poner a todos mis compatriotas en el mismo costal.
Apagamos la luz cuando botamos basura en la calle, cuando llegamos tarde a nuestros centros de labores o compromisos adquiridos, cuando no criamos bien a nuestros hijos y les permitimos que hagan lo que les da la gana, cuando defendemos lo indefendible, cuando nos dan un vuelto demás y en vez de devolverlo nos "hacemos los locos" y nos reímos del "tonto que no se dio cuenta", cuando no ayudo a un anciano a cruzar la pista, cuando vivo bajo la cultura del menor esfuerzo.
¿ Hasta cuando nos seguiremos apagando la luz ?
Entre los documentos que porto conmigo en el día a día, llevo una tarjeta de un curso de liderazgo que nunca olvidaré, y resalto dos expresiones trascendentes, que nos puede llevar a cambiar nuestra manera de pensar: ¡ Tú puedes cambiar el mundo ! y " Más vale encender una vela que maldecir la oscuridad".
Deseo unir ambas expresiones en una sola y contundente frase, la cual comparto con todos mis compatriotas:
" Podemos cambiar el mundo y lo haremos encendiendo una vela, rescatando a los ignorantes de la oscuridad".
Aunque el adjetivo "Ignorante" sea muy fuerte y ofensivo, podríamos afirmar que sólo los que ignoran a sus semejantes les apagan las luces.
Las luces se han hecho para ver con mayor claridad nuestras actividades, proyectos y actividades a través de nuestra historia de vida, es similar a cuando nacemos: nuestras madres "dieron a luz", y nos enseñaron a caminar con las luces encendidas, a vivir con alegría, a ser luz para los demás, y la única manera en que se apagará será el día en que lleguemos al horizonte, apagando la luz de la vida terrenal y naciendo para la luz eterna del Dios espiritual.
¡ Luces! ¡ Cámaras! ¡Acción! ¡ La vida es bella ! ¡ Seamos luz para un mundo mejor !
Marco Antonio Malca Delgado
Martes 14 de noviembre del 2023
23:33 pm
No hay comentarios:
Publicar un comentario