Buenos días, hoy estaba recordando el hermoso viaje que hice a un pueblo humilde pero acogedor que se llama Tuti, y está ubicado en el cañon del Colca en nuestro hermoso Departamento de Arequipa.
El viaje de Chivay hacia Tuti fue muy impresionante debido a los diferentes paisajes naturales que se apreciaba: Cordillera muy dura, lagos y caidas de agua congeladas, auquénidos en su habitat natural, cielo azul y de día un sol abrasador.
Fueron aproximadamente 7 horas de viaje por un camino duro, hasta que llegué con los miembros de mi Comunidad a este recordado pueblo que se convirtió en mi casa por quince días, en los cuales pasé diferentes experiencias, anécdotas y vivencias con nuestros compatriotas del lugar, se combinaba la tristeza con la alegría, la pobreza y la necesidad, el bajo nivel cultural de sus pobladores, su falta de atención de las autoridades regionales ya que no tenían un hospital.... sólo tenían una pequeña posta médica con una técnica de enfermería a cargo, la comisaría tenía sólo 4 efectivos; pero a pesar de las carencias la mayoría de los pobladores del pueblo eran muy hospitalarios y compartían hasta una papa sancochada a pesar de su pobreza.
Recuerdo que participé en un trabajo de abrir los canales de riego de los cerros con pico y pala en un ritual ancestral Incaico que aún se realiza llamado "El Escarbo"..... terminé con la espalda destrozada y las manos con ampollas por lo dura de esa labor, pero mis amigos de Tuti terminaron esta labor sin un sólo dolor ni lesión.
Por la mañana desde la 11:00 hasta las 15:00 aproximadamente hacía un calor muy fuerte y el clima era totalmente seco a tal punto que dañaba y resecaba la piel, y las noches se caracterizaban por ser frías...... muy frías......, con temperaturas bajo cero grados (-12º aproximadamente o más); pero lo bello de la noche era el cielo estrellado y la hermosa luna llena y por momentos las estrellas fugaces....... el firmamento te invitaba a una reflexión profunda de tu persona, de cómo te va en la vida, de pensar en un cambio profundo, sobre todo espiritual..... en lo personal pensaba en nuestro ritmo de vida en la gran ciudad, el mundo material, egoista y violento en que vivimos y observaba que los pobladores de Tuti a pesar de su pobreza y falta de oportunidad de Educación te brindaban lo poco que tenían con mucho cariño, la sonrisa tierna e inocente de los niños con sus rostros y manos cuarteadas por la dureza del clima, el saludo y acercamiento de los adultos del pueblo quienes esperaban ansiosos las charlas y los dialogos compartidos para reflexionar y mejorar como personas..... muchas personas los menosprecian y abusan de su inocencia y carencias culturales en vez de ayudarlos, habían sectas religiosas que los amenazaban diciéndoles: "Si no me das tu borrego el Taita (Dios) quemará tu choza (Casa) en la noche y si ellos se negaban en la madrugada los amedrentaban haciéndoles daño con los escasos bienes que tenían.
Hay un hecho que como Educador siempre recuerdo y es que al realizar mi labor de trabajo comunal visitaba a los pobladores en sus humildes viviendas y en una de estas me entrevisté con una familia que tenía nueve hijos de los cuales el mayor tenía 17 años de edad y al expresarles a los Padres que es importante que Eduquen a todos sus hijos y los preparen para que tengan estudios técnicos o superiores y que apoyen al mayor que era el más cercano a afrontar la vida me dijeron lo siguiente:
" Padrecito nuestro hijo mayor es bien brutito, para profesorcito nomás estudiará"..........
Cuando los Padres del joven me dijeron ésto me sentí muy preocupado ya que para ellos ser Maestro era un trabajo de nivel cultural inferior, para personas con limitaciones culturales, sin objetivos ni deseos de superación.......
Desde ese día cuando tengo ocasión comento éste hecho con mis colegas y algunos se ríen y lo toman a broma, pero otros más reflexivos optan por analizar en equipo que tipo de profesionales somos los Docentes..... y si en realidad es un trabajo para "brutitos".
Los Educadores debemos elevar mucho más nuestro nivel profesional y dedicarnos a ésta labor si realmente tenemos vocación y pasión por la enseñanza, de no ser así sencillamente no tenemos las condiciones para realizar tan importante trabajo y dar un paso al costado.
La vida de los Maestros es una Misión permanente y el día en que realmente nos demos cuenta que hemos escogido una hermosa profesión para transformar el mundo hacia el camino del bien nos sentiremos felices y realizados como personas.
Obsequiemos lo mejor de nosotros a los demás, vivamos en un compartir constante y seamos maestros nuevos cada día.
Realmente fueron días hermosos e inolvidables en éste lindo pueblo en la puna Arequipeña.
Recuerdo las lágrimas de los niños cuando nos despedimos, cuando a todos los miembros de mi comunidad nos decían: "No se vayan queremos aprender muchas cosas.... quédense con nosotros por favor"........... y nosotros sentados en el bus nos despedíamos prometiéndoles volver pronto......
Regresamos conmovidos por tanta necesidad de Cultura y Amor................
Maestros nunca olvidemos que debemos estar donde las personas nos necesitan, brindarles nuestro acompañamiento y consejo..... darles lo mejor de nosotros........
TUTI querido te recuerdo con todo mi corazón...... gracias por enseñarme tanto queridos amigos.
Dios los bendice siempre.
Marco Antonio Malca Delgado
Domingo 15 de julio del 2012.
09:23 am
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