REFLEXIONANDO SOBRE LA NOTA CERO

Queridos amigos muy buenos días. Estoy pensando en cómo evaluamos los Docentes y retrocedí a mi niñez, recordando que mi maestra de los primeros grados de primaria "amenazaba" a todo el salón con evaluarnos con "Cero Cero" si no cumpliamos las tareas o nos portabamos mal en el salón.
En realidad sus amenazas daban resultados ya que nadie quería tener como nota tan baja evaluación.
Han pasado los años y veo que la situación ha cambiado poco ya que aún existen profesores que usan inadecuadamente la evaluación a fin de amenazar  a sus pupilos, pero que en ésta epoca produce poco impacto ya que los alumnos(as) de hoy tienen otra manera de proceder y tomar las amenazas. 
"Alumno Pérez si sigue molestando tiene cero!", "Alumna Gonzales por copiarse de su compañera tiene cero!", "Todo el salón tiene cero por conversar sin permiso!"..... son algunos de los clásicos recursos que un buen porcentaje de docentes aún usan como estrategia de imponer orden, temor y "respeto" entre sus alumnos.
Los generaciones han cambiado demasiado, a tal punto de mostrarse indiferentes cuando los profesores usan la nota como recurso de amenaza y empoderamiento: "El maestro tiene el poder del registro, pero si me desaprueba injustamente lo despedirán del colegio ya que necesitan de las pensiones para mantenerse y no se darán el lujo de perder un alumno"..... es así como piensan muchos alumnos en la actualidad, sobre todo en colegios particulares.... en las escuelas estatales otra es la historia. 
Retornando al tema específico del "Cero Cero", para empezar esa evaluación no indica nada, es como que nadie ha existido para que puedas dar un juicio de valor, es la presencia nula de un estudiante al punto tal de haber actuado como una "estatua", sin vida.... sin nada que dar, sin ninguna labor realizada.
Si bien es cierto que un alumno que no ha realizado bien  su proceso de aprendizaje, al dar su  evaluación es seguro que saldrá desaprobado, el ponerle "Cero Cero" de nota es el resultado no sólo del fracaso del estudiante, sino también de los que imparten enseñanza: Los Maestros.
Entonces: ¿Que nota debe poner un educador a un alumno que no ha respondido "nada" en un examen?........ La respuesta es polémica ya que los Docentes tradicionales dirán: ¡la nota es cero pues!.
Después de casi tres decadas de trabajo en el aula, antes de poner una nota debo reflexionar que sucedió con mi alumno, por qué ha sacado tan baja evaluación y no respondió a las preguntas del examen, quizá las preguntas fueron mal planteadas y no tenían concordancia con el tema desarrollado, 
o es probable que se ponga muy tenso cuando tiene examen escrito, exposición o examen oral.
Recordemos que por sobre todas las cosas estamos evaluando a un ser humano y siempre hay algo que haya aportado durante el proceso de enseñanza.
La evaluación es un recurso importante que nos ayuda a medir los logros y avances de nuestros queridos Educandos, si lo usamos con sensatez y profesionalismo habremos dado un paso adelante en un tema que es y será polémico, ya que hasta los más connotados especialistas en evaluación educativa tienen diferentes puntos de vista sobre la forma de evaluar a un estudiante.
La mejor evaluación que recibe una persona es la que la sociedad le entregará en base a lo que ha dado, en base a su esfuerzo y esmero por aprender, y existen múltiples formas y estrategias de evaluar como para "derrumbar" a un estudiante con la triste nota "Cero Cero".
Queridos colegas, evaluemos a nuestros alumnos con alta exigencia, pero con mucho criterio en cuanto a la edad y cultura de nuestros pupilos. Que no exista la nota Cero en nuestro sistema de evaluación.
Que hermoso es ver a nuestros alumnos gozar de felicidad cuando obtienen buenos resultados, y todo un reto de desarrollo si los vemos tristes ante un mal resultado.
No es malo que un alumno salga desaprobado si se evalúa con veracidad que sucedió durante el proceso educativo, para de ésta manera replantear la estrategia pedagógica a fin de que consigan las metas trazadas en las diferentes áreas académicas.
Evaluemos con amplitud profesional, compartamos experiencias con otros maestros sobre su forma y estilo de evaluar y asistamos a cursos de evaluación educativa para optimizar nuestra tarea de maestros evaluadores de seres humanos integrales.
Dios los bendice siempre.

Marco Antonio Malca Delgado
Lunes, 03 de diciembre del 2012