LA VOCACIÓN DOCENTE

Buenos días queridos amigos. Estando cerca la celebración del día del maestro en el Perú, deseo reflexionar sobre un punto importante que es la base angular y éxito de una carrera profesional:
 "La Vocación".
 La vocación es la inspiración y "Llamado" que atrae a una persona a realizar con mayor profundidad, preparación y conocimientos la transmisión de cultura mediante una o más especialidades o áreas del conocimiento humano que siente propio, domina y trabaja con esmero, para que de ésta manera se sienta realizado profesionalmente y llegue el desarrollo integral a su familia y persona.
Para los Maestros la vocación va mucho más allá del llamado e inspiración, ya que transmitir conocimientos y formar personas hacia el camino del bien, requiere de profesionales con alta calidad humana y sensibilidad social.
Pero, ¿Que interés puede tener una persona en ser docente?
¿Si por lo general reciben bajas remuneraciones?
¿Están mal vistos dentro de la sociedad?
¿Los tildan de ignorantes a pesar de impartir cultura?
La vocación del Docente va mucho más allá de éstas interrogantes, ya que hay que tener el Don del compartir, comprender y ayudar a nuestros semejantes, llegando a la conclusión que la carrera magisterial es por excelencia de Servicio.
Hay que ser veraces en afirmar también que existen docentes que no tienen vocación de servicio ya que utilizaron ésta hermosa profesión como recurso para obtener ingresos y mantener a sus familias, así como también los hay que iniciaron su vida profesional como maestros y que en el camino se fueron "Enamorando" de su misión y estilo de vida, convirtiéndose posteriormente en connotados educadores.
Hoy en día la labor docente ha tomado mayor importancia, ya que a pesar del gran avance tecnológico y científico, la niñez, juventud y los mayores han caído en antivalores, vulgaridad y extremo materialismo, al punto tal que se ha perdido el respeto hacia los propios padres, familiares y normas sociales.
A pesar de lo expuesto, no hay una valoración real al profesional de la Educación, quién es la persona que con su ejemplo y enseñanza forma generaciones responsables, competentes, puntuales, reflexivas, analíticas y de una elevada formación espiritual.
También soy conciente y realista en afirmar que un país requiere de profesionales de la Educación con alto nivel profesional , tecnológico y moral, por lo tanto no cualquier persona esta apto para enseñar, y lo expresado forma también parte de la vocación de Gran Educador.
Ojalá que nuestros gobernantes no sigan perdiendo el tiempo denigrando tan hermosa profesión con exámenes que ya saben saldrán mayormente con bajas calificaciones, hay que analizar y diseñar un perfil del docente adecuado a los signos de los tiempos, ya que sólo los buenos maestros asegurarán un mundo mejor con su ejemplo y enseñanza, e invertir en capacitarlos y de todas maneras evaluarlos y apoyarlos haciéndoles un acompañamiento y feedback periódico, así tengan que empezar desde lo más elemental de su profesión.
Mi homenaje inmenso al verdadero maestro, al que hace todo lo posible para que sus alumnos se enamoren de la cultura, las ciencias, el arte y los deportes, el que llega temprano a laborar y recibe a sus pupilos con una sonrisa, el que termina sus labores agotado y llega a casa para seguir trabajando corrigiendo exámenes y analizando su programación curricular y ver la evolución de sus grandes pacientes: Sus nobles y buenos alumnos(as).
Queridos maestros, mis colegas, mis amigos, mis hermanos:
Demostremos en todo momento nuestra jerarquía profesional y de personas, actuando siempre con calidad, estudiando, capacitándonos, leyendo todos los días, siendo exigentes y justos con nuestros alumnos, orientando y culturizando también a los padres de familia, pero por sobre todas las cosas asegurando un mundo de paz, progreso, valores y servicio.
¡Gloria eterna a los buenos maestros!
¡Dios los bendiga siempre!
Marco Antonio Malca Delgado
08:47 am
26 de junio del 2013