viernes, 30 de enero de 2015

EL AEROPUERTO Y LAS EMOCIONES

En los últimos años he asistido al aeropuerto internacional "Jorge Chavez" de mi país con cierta regularidad, ya sea para viajar o para recibir a familiares o amistades.
El día de hoy, estuve allí pasado la medianoche, y una vez más, realicé la misma acción que he venido haciendo a lo largo del tiempo: "Observar a las personas de toda edad en cuanto a sus emociones, conducta, cultura y actitudes", y en realidad es muy interesante observar las vivencias de cada persona a través de sus sentimientos, que puede llegar a ser los de extrema alegría y entusiasmo, o también los de molestia y cansancio por la espera prolongada en el atraso de los vuelos o los trámites diversos que todo pasajero debe realizar.  
Ayer desde que bajé de mi auto observé diferentes escenarios: En primer lugar vi la penosa escena de dos taxistas  agarrándose a golpes por disputar un cliente que al final no tomó el servicio de ambos por su pésima actitud, pero luego que ingresé al primer terminal aéreo del Perú, observe situaciones agradables, como por ejemplo un joven de aproximadamente veinte años de edad esperando a su enamorada que llegaba de viaje, no me hubiera dado cuenta de quien esperaba la persona en mención,  pero al ver el cartel que tenía levantado en sus brazos y que decía "Carlos ama a Betty por siempre", me sentí orgulloso de ver como un joven de gran personalidad mostraba el cartel desde antes que su amada saliera de la recepción de pasajeros, y después ver la hermosa reacción de la señorita Betty quién muy emocionada "Premio" a su enamorado con un abrazo y un beso, así es el amor, y así son los jóvenes buenos que realmente sienten afecto inmenso por sus parejas, cómo este joven quién no sintió vergüenza en exteriorizar sus emociones, ya que en realidad muy pocos de su edad (creo yo), harían tal acción...... necesitamos Muchos como Carlos, es decir jóvenes que amen y respeten a sus parejas y valoren los sentimientos de los demás.
Observaba a las personas que esperaban a sus familiares y amistades así como también las que llegaban de viaje, todos diferentes en sus gestos, algunos lucían visiblemente cansados, otros cambiaban de actitud al ver a sus familiares y los abrazaba agradecido por recibirlos, los tripulantes de los aviones luciendo sus impecables uniformes brindados por sus compañías aéreas, las bonitas y espigadas aeromozas  que a su paso causaban el suspiro de muchos varones, gente de toda raza y de diferentes partes del mundo, en realidad visitar un aeropuerto es como haber viajado a varios países a conocer las diferentes culturas y razas del mundo.
Los Educadores somos personas de ideas y proyectos, y en lo personal realizaré un proyecto de visita cultural al aeropuerto, donde mis alumnos tengan la oportunidad de observar y determinar la procedencia de las personas  que llegan o regresan a sus destinos, que interactúen con personas de otros países de habla hispana, que dialoguen sin molestarlos para conocer sus costumbres, su cultura, su arte y música, así como también que refuercen sus conocimientos de Inglés practicando con turistas de países que hablan este importante idioma a nivel mundial.
Visitar un aeropuerto es en realidad una gran oportunidad de ampliar nuestra cultura integral conociendo a personas de toda edad y de todas partes del mundo, pero también no olvidemos que no debemos incomodar si nuestros visitantes no desean dialogar o se muestran reacios a entablar una amigable conversación a fin de conocer más de ellos y sus lugares de origen.
Me despido de Ustedes, siendo las 12 y 30 de la madrugada tengo a mi familiar frente a mí y la veo muy cansada, pero contenta.
Cuando asistan al aeropuerto no se olviden de profundizar en la gente y su cultura, es en realidad muy interesante y nos ayudará a ampliar nuestros horizontes y desarrollo.
Dios los bendiga siempre.
Marco Antonio Malca Delgado
Viernes 30 de Enero del 2015
20:00 pm
    
    

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