En mi patria, el Perú, durante el mes de julio, muchas escuelas participan de desfiles en homenaje a la patria, los pequeños de inicial desfilan con sus trajes de bomberos, médicos y enfermeras, causando alegría y ternura entre los asistentes, niños de primaria así como los jóvenes de secundaria, marchan bajo una tradición y modelo de los gobiernos militares de la historia contemporánea del Perú y que mantienen ese "estilo", o utilizaré la expresión del célebre ministro de educación: "práctica cultural", en el cual los niños y jóvenes imitan posturas castrenses, corte de cabello a ras, ser gritados por sus instructores, que en la mayoría de los casos fueron tratados de igual manera ya que hicieron el servicio militar obligatorio, que a posteriori les sirvieran como fuente de ingresos y, bajo la aceptación de la escuela, perder clases para que, a través de ensayos, llegar a la perfección, a la marcialidad "casi militar", para en el mejor de los casos ganar el "gallardete", un pedazo de tela con adornos e inscripciones que expresan que fuiste el mejor colegio en marchar... luego retornan al colegio y siguen vistiendo con la camisa fuera del pantalón, insultándose y mostrando la ropa interior al vestir inadecuadamente.
Pero los que si marcan la diferencia son los alumnos integrantes de la banda de músicos, esas almas sensibles que ven la vida a través de sonidos y melodías, y que al juntarse, emiten hermosos sonidos musicales y los convierten en marchas militares, valses, marineras y festejos, sinfonías, huaynos y salsa, son y sabor a través del arte convertido en música.
Analía con el bombo hace que todos lleven la armonía al caminar con el pie izquierdo, Ximena toca el saxo barítono, emitiendo sonidos hermosos que acrecientan nuestro estado de ánimo, Valeria toca la trompeta, y a través de su importante aporte en el grupo, ofrece sonidos claros y poderosos, Patricia toca el redoblante, su misión es llevar la armonía a través de sonidos con un gran eco que logra a través de sus baquetas, utensilio importante que se puede tocar "boleando" para que los movimientos de las manos luzcan elegantes y mágicos.
Sería diferente si se organizara una mañana de pasacalle acompañada por las bandas de músicos de todas las escuelas e instituciones culturales o militares, con representaciones de trajes típicos, y representar a las regiones del Perú de manera colorida y trascendente.
El ensayo de la banda me hizo retroceder al siglo XX y recordar con emoción cuando desfilé con la banda de músicos de mi colegio, con escarpines y guantes blancos, luciendo una banda rojiblanca desde el hombro hasta la altura del estómago y mi inolvidable escarapela en el pecho, la cual lucía con amor e identidad hacia mi patria, la misma que me enseñaron mis padres desde que tengo uso de razón.
Todos tocábamos diferentes instrumentos para emitir una hermosa melodía, éramos más de 100 músicos con instrumentos variados: tarolas, napoleones, redoblantes, bombos, platillos, triángulos, cornetas, trompetas, bugles, trombones, tubas, fagots, saxofones, clarinetes, flauta traversa, tubas, etc.
Cada instrumento emitiendo sonidos y acordes completamente diferentes, pero que a través de los músicos que dan vida a estos insumos del arte musical, logran producir una hermosa marcha, una salerosa marinera, un enamorador vals, una serena sinfonía, un romántico bolero, una oda al hermoso mundo del arte a través de diferentes sonidos y acordes, con otro agregado importante: la lectura musical: el pentagrama, cinco líneas horizontales y cuatro espacios entre ellas, que sirven para posicionar las notas musicales.
La banda de músicos es un claro ejemplo de como su puede elaborar un "hermoso producto" en equipo, de como a pesar de ser extraordinariamente diferentes en modelos, tamaños y formas, al unirse logran fusionar una hermosa melodía, capaz de retumbar mentes y corazones, de hacer vibrar las fibras más profundas del corazón y emocionar hasta las lágrimas a millones de personas.
Imaginemos que cada uno de nosotros fuera un instrumento musical: ¿Cuál serías? En lo personal, sería el saxofón, por sus hermosas melodías y diversidad de sonidos y emociones, la cual emite inolvidables acordes de sensible creación.
Cada uno de nosotros es parte de la "gran banda de músicos de la humanidad", dejamos nuestras más bellas melodías plasmados en las mentes y corazones de los que queremos y nos rodean, los años y nuestras experiencias nos hacen tener diferentes experiencias musicales, que nos hacen "saborear" todo tipo de vivencias.
Mi querido padre Roberto expresaba que cuando era muy pequeño, tocaba una olla pequeña que hacía las veces de un tambor, con dos palos de madera que hacían las veces de baquetas, y le decía: "Papá, soy "el paquitán escarlata" en relación a una serie para niños cuyo nombre original era "El capitán escarlata", y que marchaba tocando mi improvisado instrumento musical, instrumento que toqué en la banda de músicos de mi recordado colegio, cuyas baquetas conservo hasta la actualidad.
Caminaré por la vida tocando los acordes de la bondad, brindando mi mejor melodía solidaria al que necesite de mi ayuda espiritual y fraterna, de manera especial a los niños de la escuela, que en la actualidad claman por melodías que lleven paz y tranquilidad en sus mentes y corazones.
El mejor ensayo aún está por llegar...
Marco Antonio Malca Delgado
Domingo 21 de junio del 2024
23:21 pm
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