Buenos días amigos. Ayer, muy temprano en la mañana salí a trotar, y en mi ruta, divisé en el piso de pequeñas piedras de un parque, un fragmento de la escarapela con los colores rojiblancos de mi patria, el Perú.
Detuve mis pasos de trote y observé este pedazo de escarapela, objeto que muchas personas llevan en el pecho, en especial durante las fiestas patrias, en que conmemoramos y celebramos el aniversario de la independencia de tan querida nación...mis colores estaban por los suelos...
Al ver mis colores , recordaba el patriotismo e identidad que en los últimos 15 meses respiran gran parte de niños, jóvenes, adultos y ancianos peruanos, bajo la coyuntura de la clasificación y participación del equipo de fútbol en el mundial organizado por Rusia, en el presente año 2018.
Habría que analizar, para no ser negativo, si esa demostración de patriotismo e identidad se demuestra en el día a día a través de nuestros buenos actos de civismo, cultura y amor al prójimo, ya que no podemos afirmar que sea tan sólo un "saludo a la bandera".
Pero, es real que existe un marcado falso patriotismo, incluyendo aquellos que van al estadio y lloran cuando cantan el himno nacional, y que posteriormente llegan tarde a sus centros de labores o postergan a sus propios padres.
Muy cerca al trozo de escarapela que encontré y levanté, se hallaba una colilla de cigarrillo que alguien había consumido y dejado en el suelo, por coincidencia al costado del pedazo de escarapela del Perú, y bien puede representar los vicios que por historia ha padecido tan bella nación, y que lamentablemente aún siguen en vigencia, tales como la corrupción, estafa, falta de compromiso, deslealtad, delincuencia e inmoralidad en todos los niveles, flojera, envidia, argollas y grupos de incapaces e indeseables depredando un país tan sufrido, tan a la deriva, en que si no nos atrevemos a cambiar la historia seguiremos siendo esclavos de la ignorancia y el engaño...y nuestros colores seguirán por los suelos...sé que no son todos...
Estoy seguro que también hay situaciones positivas en el día a día, pero la verdad, siento que estamos en una grave crisis social, y que, desde nuestras áreas de desarrollo y entorno, debemos dar lo mejor de nosotros para levantar nuestros colores del suelo.
Estamos a pocos meses de cumplir el bicentenario de nuestra independencia, y llegada esa fecha, no podremos cantar somos libres, seámoslo siempre, si no nos "Libramos" de aquellas personas, que lamentablemente abundan, que dejan nuestra bandera por los suelos...
Finalmente, levanté el fragmento de escarapela de mi patria que estaba por los suelos, la guarde en mi bolsillo, y cuando llegué a casa la he colocado en mi velador, en un lugar visible, para siempre recordar que llevo en mis venas la sangre roja, símbolo de vida y amor, y la bandera blanca de la paz, clavada como estaca en mis actos, que siempre serán bien intencionados y con deseos de ayuda a mis semejantes.
Levantemos nuestros colores...no los dejemos por los suelos...
Dios los bendiga por siempre.
Marco Antonio Malca Delgado
Miércoles 11 de julio del 2018
12:01 pm
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