DESAPROBADOS EN CONDUCTA

Era el año 1987, había 63 alumnos por aula, como docente, estaba acostumbrado a trabajar en aulas masificadas, los padres sabían que las aulas "reventaban", pero igual apostaban por la buena educación de la primera escuela donde me acogieron, en las que mi inexperiencia veinteañera hizo que tenga  vivencias de diversa índole.

Como tutor, era muy exigente con mis pupilos, y si uno o más estudiantes salían desaprobados en conducta era "problema de ellos", las normas de comportamiento y disciplina la sabían, ya que la compartíamos en las horas de tutoría y era de conocimiento de los padres de familia.

Cuando entregábamos "libretas de notas" bimestrales a los padres de familia, muy pocos padres reclamaban por algún promedio de las diferentes áreas de aprendizaje, y si sus hijos salían desaprobados en comportamiento, la "culpa" era del estudiante, no de la escuela, ni de los maestros.

Las normas y reglamentos de disciplina de antes se cumplían a cabalidad, al parecer esto duró hasta los noventas, después todo cambió...  

37 años después, llega la reunión bimestral de padres de familia, el profesor tutor de secundaria expresa su preocupación por las actitudes, mal comportamiento e irresponsabilidad de los alumnos a su cargo, lo cual generó que unos cuantos salieran desaprobados en conducta, causando que los padres se molesten con el docente y "lancen el grito al cielo" por las notas desaprobatorias en conducta.

¿Será que el profesor es malo? ¿Los estudiantes son inmaculados? ¿Nadie debería desaprobar en conducta? 

¿Es que en 30 años todo cambió? ¿Deben los docentes "tolerar todo" a sus alumnos?: Llegar tarde, incumplir con sus deberes, agredir verbalmente a sus compañeros, insultarse a través de redes sociales, hacer videos invadiendo la privacidad de otras personas incluyendo a sus maestros, ir al colegio vestidos inadecuadamente, faltando el respeto a las normas de la escuela.

¿Es que es tan complicado "portarse bien"? ¿Todos tienen problemas psicológicos? ¿O estamos en un periodo de debacle social? 

Agregado a todo esto: ¿Los padres se molestan con los docentes de la escuela? ¿Cuál es su deber entonces? 

Lo cierto es que los tiempos han cambiado, en algunos ámbitos para bien.

Ahora los niños y jóvenes son tratados con mayor "humanidad" por sus padres, tienen mayores oportunidades de desarrollo, pero al mismo tiempo, se ha reducido enormemente la exigencia en la formación férrea que los niños y jóvenes heredaban de sus familias: El saludo, el buen vestir, el respeto a los mayores y los de su propia edad, la puntualidad, el uso de pañuelo y papel higiénico en el bolsillo, el buen porte, el amor por los estudios y la superación personal era algo digno de resaltar.

¿Se da esto ahora en el mismo porcentaje que antes? ¿Son los estudiantes de hoy mejores que los de antes en la educación y formación de vida que les daban en sus hogares?

Hace poco un buen tutor informó a los padres que hay desaprobados en conducta en el aula a su cargo en el primer bimestre, habiendo el docente llevado a cabo una ardua labor tutorial, pero a pesar de ello algunos jóvenes, haciendo caso omiso a las normas del colegio, siguieron en sus actitudes contrarias a la buena convivencia en esta etapa de su formación de vida.

La escuela es tal vez uno de los últimos bastiones  del mundo donde los niños y jóvenes podrán recibir una formación de vida sobresaliente, y para lograrlo necesita contar con padres de familia comprometidos con la buena educación, que sean enemigos de la ignorancia y vulgaridad, sean exigentes con sus hijos, logrando en forma asociada a la escuela ofrecer personas útiles y de vida exitosa.

Querido alumno: ¿Saliste desaprobado en conducta? No lloriquees, cambia de actitud y tendrás a cambio las puertas abierta de una vida exitosa.

Querido padre de familia: Si tu hijo/a sale desaprobado en conducta, dialoga con sus maestros, y no responsabilices a terceros de tus deberes y obligaciones, ya que eres el primer educador, y la escuela tu socio estratégico en la formación de vida del ser más amado por ti.

Amada escuela: No bajes los brazos, sigue formando con exigencia, a pesar de que la sociedad te ha atropellado menospreciando tu liderazgo, no desmayes en formar seres humanos de primera categoría.

Educar con exigencia es generar grandes ciudadanos del mañana.

Dios los bendice

Marco Antonio Malca Delgado

00:09 am

Lunes 10 de junio del 2024