Deseo compartir este artículo que escribí para la revista "SIGNO" Educativo del Consorcio de Colegios Católicos del Perú el año 2008.
Dedicado a los niños y jóvenes sordomudos de mi Perú.
Cierto día de invierno del año 2007, me encontraba temprano en el autobús con Dirección a mi trabajo y como de costumbre, observaba el subir y bajar de toda la gente, ya sean niños, jóvenes y adultos de ambos sexos; de pronto subió al bus un Señor joven y serio, llevaba de la mano a dos pequeños con rostros alegres y sanos.... muy sanos......
Era una niña muy bonita y lúcida y un niño palomilla y juguetón que pienso era su hermano.
Al verlos reir y jugar me cayeron en simpatía pues muchos niños a esa edad quisieran aún estar acostados por el frío húmedo de las mañanas.
Al observar a los niños me di cuenta que en sus politos llevaban inscritos el nombre de su colegio, y me percaté que tenía las siglas "C.E.E." que significa "Centro Educativo Especial", el número del colegio y su distrito.
Me preguntaba a mí mismo: ¿ Qué de especial tienen esos niños? ¿Qué enfermedad sufren?
¡Si los veo tan bien! ¡Tan buenos! ¡Tan sanos! ¡Tan cariñosos! me dió la inquietud y curiosidad de saber de qué padecían estos querubines.
Veía a su padre o tutor muy serio al lado mío mirando hacia adelante y a veces a sus niños, hasta que no pude soportar y le pregunté: Señor: ¿ A que colegio asisten sus hijos? El Señor no volteó........ yo pensé que no me hacía caso e insistí, pero esta vez le hice una seña y su respuesta fue un mirarme, llevarse la mano derecha a la boca y oídos.............................
Expresándome que no oía... ni hablaba... y recién en ese momento pude comprender la situación de esta pequeña familia: Ni el padre ni los hijos hablaban... ni oían... eran "Sordomudos".
Para mí, esa mañana hubiera sido como cualquier otra en la que me iba a trabajar; esas mañanas en las que cuando estoy en el bus pienso en mi vida, mis alegrías, mis logros, mis tristezas, en mi familia, en mis deudas, en el ayer, el hoy, y el mañana..... en fin! En todas estas cosas que los humanos llamamos "Problemas".
Pero esta linda familia... ese Señor... esos lindos niños.... sordos y mudos ellos..... enfrentaban la vida mucho mejor que yo..... yo que puedo oír... que puedo hablar... que muchas veces puedo oír... pero no escucho bien... que también puedo hablar... pero muchas veces sin claridad... que por momentos los pobladores de este hermoso planeta pensamos sólo en problemas y no en lo bello de éste mundo: Las olas del mar, los hermosos picos nevados, el aire que respiramos para poder vivir, el milagro de la creación.
En dar gracias a Dios por todas las cosas bellas de la vida y los buenos momentos que he tenido y los que llegarán.
Esos niños... Angelitos de la guarda... se expresaban en el lenguaje más hermoso...
Ellos no necesitaban hablar, ni oir para dar su Amor y Alegría.
El Amor ahora estoy seguro no tiene oídos... ni habla... el Amor se expresa con sólo una mirada tierna... una sonrisa sincera... un abrazo sentido... un acompañamiento amigo..........
Un regalo de Dios..........
Quisiera imaginar cómo serán esos niños dentro de quizá quince años... ya grandes... cuando la sociedad ya los haya puesto a prueba... quisiera pensar que nunca cambiarán la expresión de su mirada... su alegría... su inmenso Amor... sus deseos de vivir y ser felices.... hoy quiero agradecer al Divino Maestro Jesús por darme un poco de entendimiento para poder comprender que todos los seres humanos somos iguales e importantes... como los niños que contemplé... como mis lindos "Sordomuditos" que me "Hablaron"... me hicieron que escuche a Dios por intermedio de Ellos... para así comprender que las personas tenemos mucho que agradecer y que dar. Sin embargo, a veces no nos damos cuenta que todo ello debemos compartirlo con nuestro prójimo.
Gracias mis niños buenos... Gracias por la lección..........
Ojalá la pueda aprender algún día muy cercano para cumplir con la misión que tengo en la vida.
Marco Antonio Malca Delgado.
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